13 de diciembre de 2016

EL PRECIO DE LA VERDAD


 Me resulta complejo hablar de los finalistas de esta edición sin intentar comprender como se ha desarrollado todo, aún así creo que debería buscar bastante más allá. Y no lo digo solo porque en ella no estén presentes aquellos concursantes que para mí de alguna u otra manera han sido los verdaderos “protagonistas” sino por las mismas personas en sí que han accedido a la final. No creo mucho en las casualidades en un formato como Gran Hermano ni en la divina providencia, en mi opinión personal tampoco son los mejores. Son múltiples las razones que encontramos cada edición para adoptar nuestro favorito, para convertirlo en ganador se suele echar mano de un mínimo de empatía, de personalidad e incluso carisma con las que te puedas sentir identificado. En una edición tan poco empática como ha sido la actual donde prácticamente nadie ha caído especialmente bien a nadie y los favoritos han sido elegidos por razones ajenas a su propia personalidad cuesta vislumbrar un perfil claro de ganador entre los finalistas.

 Creo que una de las razones de la desidia que se percibe en esta fase final es que no ha existido ese concursante “especial” que te haya podido atrapar o conquistar por alguna razón. Mucha gente habla de buen o mal casting, creo que la clave no ha estado en la calidad sino en el desequilibrio, de diecinueve concursantes apenas cuatro o cinco han logrado entablar una cierta complicidad con la audiencia. Un casting es como un melón, por muy buena presencia que tenga a la vista y muy bien que te hable el vendedor de lo bueno que está hasta que no la abras no sabrás ciertamente lo que te espera. Y la impresión que tengo es que en el casting de este año ha faltado lo más sencillo y a la vez complicado... mucha verdad. Seguramente para los intereses de la cadena que iba buscando un prototipo específico para elaborar su propio guión hayan sido los mejores aspirantes, al fallarle este y requerirle al menos ese morbo que surgiese del conflicto como plan b, estos no han desentonado, han gritado mucho, se han enfadado, se han insultado, han proyectado histeria, mezquindad, hostilidad y lo que es peor, se han creído incluso que estaban dando juego mientras tanto. Cuando falla el argumento principal, el conflicto suele ser un buen remedio televisivo y a veces se vuelve necesario, pero si no queremos agotarnos con repeticiones y caer en la redundancia se habría hecho necesario un buen contrapunto, algo de humor por ejemplo, de lo que la edición ha carecido.

  Está claro en toda edición que para que alguien te caiga bien, alguien te tiene que caer mal, no hay héroes sin villanos y en esta también han aparecido... lo que pasa es que han sido poco creíbles. No creo que hayan cubierto nuestras expectativas. Otra de las causas de esa falta de empatía que ha existido entre el casting y el espectador también podríamos buscarla en nuestra propia historia, y este es un hecho que se podría volver a repetir. Los actuales concursantes han crecido viendo Gran Hermano; cuando se puso en marcha la primera edición, Bea tendría dos o tres años apenas, creció a la sombra de GH, y como ella la mayoría de perfiles de su edad. Se hace muy aburrido a veces verles participar en un juego en el que creen saberse todos los trucos y que cuando se presentan al casting ya son casi expertos puesto que llevan viéndolo desde pequeños, de ahí a la falta de naturalidad y al desgaste del formato solo hay un paso, de ahí la desconfianza inicial de ese espectador que ya estaba aquí mucho antes.

  Pero no es solo esto, es que a la vez que ellos también ha crecido esa otra parte de la audiencia que como ellos no han conocido otra parte de la televisión quizás más creíble y se han hecho mayores a la sombra de esa televisión “ligera”, una nueva generación que no exige tanto, ni calidad, ni transparencia ni honestidad, que no ven más allá de un simple enfrentamiento primario, un cuerpo bonito o un amor de instituto, auténticos fans de formatos donde sus protagonistas son capaces de tirarse de los pelos por salir en la tele para luego hacer cuatro bolos en cualquier discoteca y algo de notoriedad. Hay una pequeña linea entre una visión y otra, quizás “aquellos” sean algo más ruidosos pero no se puede descartar a “estos” que han evolucionado a la par que una televisión y un reality estancado en el bucle de la trivialidad pero que... por desgracia ha funcionado.

  Los favoritos de unos ahora se unen, interaccionan a través de las redes sociales y forman pronto una comunidad de apoyo con un objetivo común. La televisión, Gran Hermano o cualquier reality se está intentando adecuar a este fenómeno, ya no tienen tanto efecto los corta-pegas de un vídeo editado con una música adecuada, el verdadero alma de los concursos, a pesar de lo que mucha gente diga, está en las redes, la nueva mayoría social que concursa al mismo tiempo que ellos, ya no solo miramos o nos tragamos lo que nos echen, ahora prácticamente actuamos de forma simultánea que la casa a través de nuestros comentarios inmediatos, nuestros gifs, vídeos, hashtag, estamos casi tan activos como ellos llevando a cabo nuestro propio GH paralelo, nos hemos vuelto más participativos y aunque la televisión y su mentalidad conservadora avance tan lentamente, la audiencia arrastra al reality a un nuevo tempo, a veces van a remolque pero no pueden ignorarlo, todo cambia, y Gran Hermano aunque se resista se ve a veces arrastrado también a este nuevo tiempo.

 Son muchas las cosas que te hacen pensar al intentar buscar algún tipo de explicación, no hay ninguna. Cuatro finalistas sin peso específico aparentemente que quizás también se hayan visto atrastrados por una vorágine desconocida para muchos, nueva para otros o de difícil explicación para unos cuántos tambien. Yo lo intento, y aún así, tampoco lo logro entender. Bea y Rodri son el producto de una relación de carpeta creada para concursar, Miguel el resultado de un experimento y Meritxell la víctima de una frustración adolescente, Bea fue expulsada por la audiencia, Rodri gracias al invento del club jamás estuvo nominado, Miguel ha sido el beneficiado de una estrategia grupal y Meritxell la heredera de un saco de votos huérfanos. Uno de ellos, será el ganador de la presente edición de Gran Hermano a pesar de que ninguno de ellos ha destacado por su credibilidad, esa sobre la que siempre se ha sustentado el éxito de Gran Hermano, un programa que había atraído a millones de espectadores por la verdad que transmitía por encima de todo. Me preguntaba si el nombre del ganador de este año será el precio que GH ha de pagar por subirse a los nuevos tiempos...

8 comentarios:

Jacaranda dijo...

Balzac
Recurriendo a tu ejemplo del melón, creo que el símil es muy acertado, pero tras 16 ediciones abriendo melones ¿porque el numero diecisiete aparece podrido? ¿no se supone que esto está en manos de psicólogos que tienen que ver más alla de..? ¿ o ahora los castings son aprobados o rechazados por los guionistas ?.
Cualquiera de los cinco que dices han sido aceptados o “adoptados” por la audiencia, en cualquier otra edición, hubiesen sido expulsados, esa es mi opinión. Como ejemplo pongo a Nagore que fué expulsada como si todos a una diesemos la gran patada en el culo, virtual. Ella, que el Domingo se apartaba como si esa discusión en plató le fuese completamente ajena, será que desde que dobla y plancha las sabanas de la Barneda se siente mucho más “fisna” y digo fisna con s, en sentido ridiculizante de la palabra.
Dentro- sopor absoluto
Fuera- jaula de grillos por un lado y decepción por otro. Los grillos cobran por ello y nosotros miramos..la palomitas mejor para el peliculón de A3

PK Grosella dijo...

Hay que ver la final de infarto que estamos viviendo!!!
A mi me va el corazón a mil!
Menos mal que veo que no soy la única a la que me pasa esto.... veo que a vosotros también.
Deberíamos relajarnos un poco o voy a tener que poner un chiringuito de tranquimazines...

En fin....

Tienes razón balzac. En la final están los que son, pero no deberían ser los que están. Menos Miguel, claro! :P Miguel sí ha sido protagonista.... no me digas que no! que se ha estado hablando de él todo el concurso. Lo que pasa es que sí es verdad que tampoco es que sea un claro merecedor del premio. Yo lo tengo de favorito sólo porque me cae bien, ya lo he dicho muchas veces, pero reconozco que no es merecedor del premio, porque se ha limitado a hacer su papel (papelón). Seguro que si hubiera sido tal cual es él, sin tanto confetti y espumillón, le hubiera ido mejor.

Esta ha sido la edición de los gritos, o mejor, del griterío. Gritos han habido todas las ediciones, pero eran gritos que se entendían.
Por ejemplo "Si me quiero tirar un pedo aquí, me lo tiro!", o "Dónde están los papeles de la paella???", o "Quién me pone la pierna encima para que no levante cabeza??", o "Me lo paso por toa mi rajeta!!".... Eran gritos entendibles, razonables, lógicos, divertidos.
Pero los de esta edición.... no había Cristo que los aguantase! Era gritar por gritar, discutir por discutir, chillar, escandalizar (de escándalo, no de moñería). La casa ha sido una jaula de grillos puestos de speed!

La verdad es que tengo ganas de que termine, porque si no me gustaba el patio de la trena que era, el claustro de convento de ahora tampoco me convence.
Ni calvo ni tres pelucas!
(Mira, este podría ser el lema de Miguel! jajaja)

Y sí, ellos no tienen la culpa. Los han escogido y debe ser porque son los perfiles que gustan ahora: jóvenes, guapos, gritones, incultos y broncas.
Sí, todo evoluciona, pero que la evolución vaya por este camino... El año que viene ya si eso que metan al Chuli, al Vaquilla, al Josele, al Culebra, la Juani, la Sole... Total ya puestos a dar espectáculo, que sea gordo!
(Y fíjate, que ahora que miro sus caritas sonrientes en las fotos del lateral.... si parecen hasta normales! jajaja Y creo que lo son, pero por separado. A bulto son una madeja liada que no hay por dónde!)

A ver si va a ser que los melones son ellos...
ELLOS, no ellos.

Unknown dijo...

Balzac, estupendo análisis del actual GH. Me dejas siempre con la boca abierta!
Y si, estoy de acuerdo con Jacaranda ¿por qué este año no ha funcionado?
Son demasiadas ediciones que nos van desalentando por la cadena, la productora, la línea editorial, los guionistas o lo que sea, pero este GH17 se ha llevado la palma y creo que gran parte de la "culpa" ha sido de los habitantes de la casa, más dispuestos a ser protas o pasar desapercibidos que a disfrutar, independientemente de que el premio este ahí y no es moco de pavo.
Si los concursantes hubieran disfrutado nosotros nos hubiéramos contagiado, al menos eso pienso, y todo hubiera salido natural; dejarse llevar, impregnarse de la casa es lo que nos gusta a los locos de este programa y no estar pendientes de las cámaras, de hacer vídeos, llamar la atención con dramas o boberías carpetarianas ( me acabo de inventar una palabra? Jajaja)
En fin, también tendremos nosotros parte de "culpa" por asistir al espectáculo y tragarlo.... Desahogados con el pataleo y cabreos varios, no tenemos remedio!

Unknown dijo...

A la vista está como va la cosa, Balzac haciendo magia como siempre pero hay poco que comentar. Cuando se han visto 2 comentarios a una entrada aquí a estas horas? Seguimos aquí aunque hibernando obligados.

Alicia dijo...

PK, yo me sumo a tu iniciativa. Si van a meter quinquis que metan a quinquis de verdad.

A ver señores de T5: yo quiero un GH18 con el vaquilla, el torete, el jaro, los latin kings, el ku klux klan y un par de mossos d'esquadra para compensar. Quiero carpetas entre neonazis y ñetas, narcotraficantes y geos ...que pasen hambre, el síndrome de abstinencia, que los aislen como si estuviesen en el mismísimo Guantánamo, que manipulen sus mentes con química, que hagan fiestas orgiásticas y les apliquen electroshocks en el confesionario cuando se salgan de la línea electoral... y de premio un millón de dolares, por supuesto. Esto si que iba a vender joder.

Falconetti dijo...

Como dice Balzac,hablar de los finalista es ardua tarea,han llegado al final y ni ellos dan crédito,saben que entre ellos esta el que se va a llevar el maletín y los cuatro saben que es para Bea.

Cierto es que nos hemos adaptado a lo que teníamos y hemos elegido un concursante "favorito" del plantel seleccionado,como hacemos siempre y cierto es también que de diecinueve concursantes,cuantos han destacado un poco? cuatro,cinco? el resto,totalmente prescindibles.

La verdad es que ha sido una edición muy chunga, que nos la hemos tragado por amor al formato,hay quién dice que ha sido la mejor en muchos años,yo discrepo.

El bajón de audiencia les podría dar un poco en que pensar,pues ni con esas,la última gala,la anterior,la anterior,los Debates todos,no han atendido a nuestras quejas,no contamos,no escuchan?absolutamente nada!!

Nos vemos ante una final de m***,en una edición de m***,con presentador y colaboradores de m*** y con un futuro ganador de m***

Nos han tocado mucho las narices,a este ritmo,no sé lo que pueda durar GH,como programa estrella de una m*** de cadena,no se merecen una audiencia leal al programa.Nos ningunean como les da la gana.

PK,dices que Miguel no es merecedor del premio,ok,de acuerdo,y cual de ellos es el que se lo merece?Rodri,Mery,Bea? uffff,es que.....



Sor Passo dijo...

Balzac:
Gracias una vez más por tan buenas reflexiones.
Pienso que muchos seguidores del programa, los que empezamos a disfrutarlo siendo ya adultos, nos sentimos decepcionados y desesperanzados ante el rumbo que han tomado las cosas desde las últimas ediciones.
Me parece que has dado con una de las claves de lo que está sucediendo con los concursantes; se han criado con otro tipo de televisión, una, en la cual todo vale con tal de “chupar cámara”. Ahora ya no importa cómo te hagas “famoso”, da lo mismo ser falso, desleal, cochino o mentiroso; lo importante es “salir en los videos” aunque salgas como un impresentable, hoy en día eso es lo de menos.
Esa es la televisión que tenemos, esa es la verdadera ------ editorial de la cadena que gestiona nuestro querido programa, y poco podemos hacer; o tragamos o nos bajamos del barco.
Dicen que esta edición han bajado muchos los índices de audiencia, ojalá esto sirva para enmendar errores y para reparar muchos daños que se han hecho al concurso.

Ojalá también que los responsables del casting seleccionen a los concursantes con una franja de edad más amplia, eso siempre es enriquecedor: en esta edición los únicos “mayores” eran Bárbara y Alain (38 años), y el resto de unas edades similares (sobre los 20 y ). Demasiado “iguales”en edades, en bagage vital, y en pretensiones.

Estamos desencantados desde hace tiempo y observamos incrédulos una agonía de final. Entre los cuatro que quedan ninguno nos ha convencido, y por mucho que adornen la final no van a quitarnos esta sensación amarga. Entre esos cuatro no está un merecido ganador, no lo está.

Y no es culpa nuestra.

Anónimo dijo...

Hola:
Tremenda entrada . Enhorabuena!!! Refleja lo que muchos pensamos. Sin embargo, en el camino a la final se están descubriendo situaciones interesantes. Muchas protagonizadas por Miguel. Nos está mostrando una gran persona, educada, cariñosa... Que no merece ganar? Porque se declaró a Pol? Y ya no es bueno? Por su peluquín? Pues si.. Fue puro teatro en ocasiones. Pero otros muchos también lo han hecho y no han sido ridiculizados tanto por el programa. Es más, les han aplaudido. En este caso , la mugre pandi de Miguel, como muchos decís, ha sido la editorial de gh. Un acoso y derribo. Eso en lo referente a Miguel.
Otro gran descubrimiento está siendo Rodrigo. Humor, vacilón, educado... Y un personaje también desplazado a un segundo plano por su carpeta. Se le acusa de vago, de tomar el sol, de estar "tumbaito". Ok. De acuerdo, pero todos sabemos quiénes son las auténticas vagas de la edición.
Parece ser que es obligatorio que gane una fémina.... No han hecho mucho más que ellos dos. Bea ha vivido su concurso con Rodrigo y el remolque rodea es de los dos. Para mi , las actitudes de Bea ,dejan mucho que desear. Al igual que las de Meritxell. Sus salidas de tono continuas , quejas y vocabulario... Tampoco les hacen merecedoras de ningún premio.
En el caso Meritxell, mucho menos. Lo suyo es de órdago. Es mentirosa compulsiva. Vive una realidad paralela. Tergiversa absolutamente todo. Creo que ella le buscó a Alain, no pasa nada... Pero en su cabeza el se le acercó. Y creo que lo hizo la noche en la que se acercaba a Clara. Ella intuía que a él le atraía y lo dijo. Se lanzó y se montó su historia. Como se la montó con sus victimismo de nadie me hace caso y estoy sola. Amén de lo sucia que es. Tiene un punto de malicia para destacar ella, aunque pise a los demás.
Dicho esto, ganará una chica... Las adaristas no soportan que gane Bea. Pero tampoco soportarían el triunfo de Miguel(se declaró a Pol) , ni el de Rodrigo(pasó de Adara de la misma)... Para mi, serían mucho mejores ganadores y Bea y Meritxell ...Tercera y cuarta. Solo opino , no impongo.
Besitos.

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